Karol… Aitor
Esa sensación de estar rodeados de buena gente y sentirte como en casa es la que pudimos disfrutar desde el primer minuto retratando el gran día de Karol y Aitor. En una calurosa y soleada tarde de octubre y con un escenario inmejorable, como es nuestro querido mediterráneo, nada podía salir mal, tan solo fluir como las olas que nos acompañaron durante toda la tarde.
Una boda cargada de alegría, de sonrisas, de gestos y miradas cómplices y de abrazos de los de verdad, de los de apretar fuerte, de los que dan los buenos vascos como Aitor. Con muchos invitados que incluso cruzaron el charco para estar allí ese día, que aquí os dejamos, tal cuál fué ni más ni menos.
Qué bonito es echar la vista atrás y poder ver reflejados en el reportaje fotográfico todas las miradas, risas, lágrimas… los detalles y la complicidad de aquel día. Sabéis captar el tono emocional, el alma de lo que está pasando. Las vuestras dejan de ser meras fotos para convertirse en recuerdos fieles de lo que pasó. Gracias a los dos, Fanny y Sinuhé, por formar parte de esto, por vuestra forma de ser, que en definitiva se traduce en vuestra forma de trabajar… cercana, agradable y sencillamente espectacular!!
Muchísimas gracias Karol. Al final nuestra mejor recompensa son comentarios como el tuyo, que son el mejor combustible para nuestro motor de vida. Muchísimas gracias a los dos.